Mucho se ha hablado de que los números del presente año no cierran y que el déficit fiscal sobrepasaría los 1,5 establecido en la Ley de Responsabilidad Fiscal. La Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP) se ha pronunciado en varias ocasiones al respecto y ha advertido sobre la necesidad de proteger el pilar fundamental de nuestro crecimiento reciente, la estabilidad macroeconómica.
Debemos coincidir que este pilar no asegura el efecto derrame en la economía, menos cierto es que sin ella se generaría un proceso de reversión en los avances contra la pobreza e inequidad. Recientemente hemos realizado llamados a los funcionarios públicos a reconocerse como clase privilegiada y a aceptar que el momento económico no permite ajustes salariales, que en el futuro estos ajustes tendrán que ser a cambio de algo, léase mayor productividad.
La CNCSP ha señalado además en reiteradas ocasiones que la gobernabilidad democrática es el segundo pilar sobre el cual deberíamos construir nuestro desarrollo y depende del nivel de institucionalidad que seamos capaces de construir. Aquí nuestro llamado al sector político, deben poner por delante al país y juntos construir este tan necesario segundo pilar.
Hasta el momento, el sector político no demuestra conciencia e interés en que este segundo pilar de gobernabilidad democrática e institucionalidad estén en la agenda, al contrario, vemos confrontaciones que buscan destruir. Eso que no nos ha llegado – y esperamos que no nos llegue – la violencia que acompaña a los reclamos ciudadanos en la región, muchos de ellos incluso, impulsados por sectores que buscan destruir antes que la genuina atención de sus reclamos.
La Cámara lamenta reconocer que con los pedidos de aumentos de sueldos, sin contrapartida en resultados, pero también sin contrapartidas en el ingresos para afrontar el eventual mayor gasto rígido, estamos a estas alturas camino a destruir nuestra estabilidad macroeconómica y nos condenamos al atraso.
Si la sociedad civil no reacciona, nos esperan negros nubarrones en la economía y sabemos que eso es el alimento para la inestabilidad política y social.
La Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay hace un llamado a todas las clases de dirigencias a poner su esfuerzo en sostener la estabilidad macroeconómica, la estabilidad política y social, pues sin éstas, es una utopía el derrame del bienestar a los sectores de menores ingresos.